Contentido
Fe Salvadora
La fe es central a la salvación, y es lo más difícil.
Definición de la “fe” – es una creencia, o sea, una confianza profunda que afecta y cambia la vida porque estás convencido que es la verdad, que es real. Es de tomar, recibir, y abrazar esta creencia como tuya, tanto que vives como si es real.
No cualquier fe salva. Entonces ¿Cuál fe salva?
Stg. 2:19 Tú crees que Dios es uno; bien haces. También los demonios creen, y tiemblan.
Mat. 8:29 Y clamaron diciendo: ¿Qué tienes con nosotros, Jesús, Hijo de Dios? ¿Has venido acá para atormentarnos antes de tiempo?
Mar. 1:24 diciendo: ¡Ah! ¿qué tienes con nosotros, Jesús nazareno? ¿Has venido para destruirnos? Sé quién eres, el Santo de Dios.
Mar. 5:7 Y clamando a gran voz, dijo: ¿Qué tienes conmigo, Jesús, Hijo del Dios Altísimo? Te conjuro por Dios que no me atormentes.
Luc. 4:34 diciendo: Déjanos; ¿qué tienes con nosotros, Jesús nazareno? ¿Has venido para destruirnos? Yo te conozco quién eres, el Santo de Dios.
Hch. 16:17 Ésta, siguiendo a Pablo y a nosotros, daba voces, diciendo: Estos hombres son siervos del Dios Altísimo, quienes os anuncian el camino de salvación.
Es algo cierto que los demonios entienden quien es Jesús, que Él es el Salvador del Mundo, el Juez de todos. Pero esta “fe” o creencia no les brinda salvación. Vemos que hay muchos en el mundo que creen mucho sobre Dios, y todos ellos como muchos de los judíos del día de Jesús no van al cielo. La fe que salva es fe en Jesús el Cristo, el Mesías o especial de Dios puesto para la salvación. Que Jesús es Dios y murió en nuestro lugar y se resucitó para darnos la salvación.
Aquí regresamos al concepto de Juan 1:12, que tenemos que recibir personalmente la obra de Jesús en la cruz personalmente para salvarnos de nuestros pecados. Creyendo que existió Jesús y que murió en una cruz no salva a nadie. Tenemos que apropiar esta creencia personalmente a uno mismo. Lo que salva es de recibir que Jesús murió en la cruz PARA MÍ. Esto es lo que salva. Es una relación personal, y hay obligaciones personales de los dos lados.
El Sembrador y los Suelos de Mateo 13. – Cada suelo representa un tipo de persona y su tratamiento del evangelio en su corazón. Todos tuvieron el evangelio en un tiempo, pero solamente un tipo tuvo la salvación. La persona verdaderamente salva tiene una fe distinta que le brinde la salvación. Él cree varias cosas específicas, y en una forma especifica que cambia su vida. Esto es lo que hace la salvación verdadera.
La persona de Jesús.
La persona salva cree que Jesús es Dios encarnado. En la misión de proveer salvación a los seres humanos, Dios vino en forma humana para sufrir y morir.
Mat. 1:23 He aquí, una virgen concebirá y dará a luz un hijo, Y llamarás su nombre Emanuel, que traducido es: Dios con nosotros.
Jn. 1:14 Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad.
1 Jn. 4:1 Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas han salido por el mundo.2 En esto conoced el Espíritu de Dios: Todo espíritu que confiesa que Jesucristo ha venido en carne, es de Dios;
Completamente Hombre, Completamente Dios – Hay dos elementos aquí que distingue el salvo, que cree que la persona Jesús dela Biblia es completamente Dios, y que cree que vino en la carne, se encarnó. La encarnación es un paso hacia la salvación de los hombres para Jesús. Tuvo que nacer como hombre.
Jesús fue sacrificado en tu lugar.
Heb. 9:22 Y casi todo es purificado, según la ley, con sangre; y sin derramamiento de sangre no se hace remisión.
1 Pedro 2:24 quien llevó él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros, estando muertos a los pecados, vivamos a la justicia; y por cuya herida fuisteis sanados.
1 Pedro 1:18 sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata,19 sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación,
2° Corintios 5:21 Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él.
Parte de la creencia de un salvo es que Jesús sufrió y murió en el lugar tuyo. Esto quiere decir que hay una acción de hacer la obra de Jesús personal a su vida. No es nada más de creer que Jesús murió para otros para hacerle salvo, sino murió para mi, para hacerme salvo.
También debemos anotar que el punto céntrico aquí es que la persona salva cree que Jesús realmente murió en la cruz, y se resucitó de la tumba. Sin esta creencia, no hay salvación.
Jesús es el único salvador y es la salvación.
Parte de las creencias que definen una persona como salvo es la exaltación de la obra de Jesús en la cruz para uno mismo. No puede ser nada que es puesto al lado de esto para distrae de la importancia de la obra de Jesús.
Isa. 43:11 Yo, yo Jehová, y fuera de mí no hay quien salve.
1 Timoteo 2:5 Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre,
Hch. 4:11 Este Jesús es la piedra reprobada por vosotros los edificadores, la cual ha venido a ser cabeza del ángulo. 12 Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos.
Luc. 2:11 que os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es CRISTO el Señor.
La salvación es en una sola persona, y esta persona es Dios, específicamente Jesucristo. Él es el único Salvador, el único mediador entre Dios y los hombres para traerles la salvación. La persona que cree que los santos, la virgen María, Buda, o una iglesia comola Católica,la Mormona, o de los Testigos de Jehová va a salvarle NO ES SALVO!
Jn. 3:15 para que todo aquel que en él (Jesús) cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. 18 El que en él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios.
Jn. 6:47 De cierto, de cierto os digo: El que cree en mí (Jesús), tiene vida eterna.
La salvación de Dios gira alrededor de Jesucristo, el Hijo de Dios. La persona que no cree en Jesús, y únicamente en Jesús para ser salvo, no es salvo. Solamente en el Hijo de Dios, en Jesucristo, hay salvación.
Salvación no es por obras, sino por la gracia de Dios hacia a nosotros, y esto es por medio de la fe.
En el punto anterior, vimos que solamente la persona de Jesús es quien que salva. Esta habla de persona o mediador por quien que uno es salvo. Jesús tiene “exclusividad” en lo de la salvación. Pero también Dios ha puesto exclusividad sobre como el salvo recibe la salvación. Dios declara que la salvación es gracia, un don, o un regalo. Es algo por lo cual no puedes comprar con ningún precio. Es algo que tiene que iniciarse en el corazón de la persona dándolo, Dios.
Además de reconocer que no podamos “comprarlo” o hacer algo como transacción para conseguirlo, Dios declara que la forma en que uno consigue la salvación es simplemente de creer en las declaraciones de Dios sobre el objeto de la salvación, y lo que él hizo en la cruz de sufrir y morir en sustituto para uno mismo. “Haciendo” esto, uno es salvo.
Ef. 2:8 Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios;9 no por obras, para que nadie se gloríe.
Tito 3:5 (Dios) nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración y por la renovación en el Espíritu Santo,
De tener fe en Jesús es de recibirle, tener relación personal con él.
1 Jn. 5:10 El que cree en el Hijo de Dios, tiene el testimonio en sí mismo; el que no cree a Dios, le ha hecho mentiroso, porque no ha creído en el testimonio que Dios ha dado acerca de su Hijo. 11 Y éste es el testimonio: que Dios nos ha dado vida eterna; y esta vida está en su Hijo. 12 El que tiene al Hijo, tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios no tiene la vida. 13 Estas cosas os he escrito a vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que sepáis que tenéis vida eterna, y para que creáis en el nombre del Hijo de Dios.
Jn. 1:12 Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios;
La salvación depende de una acción personal de cada persona. Si recibe a Jesucristo como su Salvador personal o no. En esto consiste la salvación, y en nada más. En todos los encuentros enla Bibliadonde un ministro de Dios presenta la salvación a alguien, siempre hay el elemento muy claro de recibir la salvación de Dios.
cp80 ¡No te Deprimas! ¡Anímate! es un folleto por Pastor David Cox que explica como Satanás usa la depresión para pararnos de hacer lo que debemos estar haciendo y como animarte. Define ¿Qué es la depresión? | ¿Qué causa la depresión? | ¿Cómo puedes animarte? | Cómo tratar con las Angustias | La Comunidad de Fe en su Ministerio de Animar | ¿Estás cansado de la Vida?
PDF: cp80 ¡No te Deprimas! ¡Anímate!